Clavel chino fucsia

NOMBRE COMÚN: Clavel chino fucsia

NOMBRE CIENTÍFICO: Carpobrotus edulis

FAMILIA: Aizoaceae

ORIGEN: Sudáfrica

 

DATOS GENERALES: Se trata de una planta perenne de porte rastrero (de hasta varios metros), suculento, con una longitud del tallo de hasta 2 mm.

Las hojas son de color verde vivo, a veces púrpura en los extremos, y ahusadas, con textura cérea y sección triangular, curvadas hacia arriba, de unos 10 cm de largo. En suelos muy salinos, pueden poseer una especie de costra salina que les da un color blanquecino en superficie.

Las flores, similares en cierta medida a las inflorescencias de las Compuestas, son muy espectaculares, de más de 7 cm de diámetro, numerosos pétalos imbricados de color violeta o purpura y estambres amarillos (lo que la diferencia de C. acinaciformis). ​ Florece durante la transición de la primavera al verano: en el Hemisferio Norte, de abril a julio. La fruta es comestible.

La especie es utilizada como ornamental.

respecto a su fruto, este recibe el nombre de higo de El Cabo o higo marino, siendo comestible., y como ocurre con algunos otros miembros de la familia Aizoaceae. En Sudáfrica, la fruta madura se recolecta y se come fresca o se convierte en una mermelada muy ácida. Sus hojas son igualmente comestibles.

Respecto a su uso medicinal, en Sudáfrica, las diferentes partes de la planta se utilizan en diferentes formas en la medicina tradicional. En su mayoría, las frutas y las flores se comen crudas o cocidas para las infecciones fúngicas y bacterianas. Las hojas se pueden ingerir por vía oral para problemas digestivos o se puede succionar el jugo para aliviar el dolor de garganta. El jugo también se puede mezclar en una base de loción y usarse para problemas externos como tiña, moretones, quemaduras solares y labios agrietados. ´

En origen era una oriunda de Sudáfrica, pero hoy día se encuentra prácticamente en todas las áreas templadas del mundo, sobre todo en las zonas costeras. Su carácter invasivo ha provocado dicha expansión. Una de las causas de su introducción fue su empleo como enmienda en obras públicas para asentar taludes; no obstante, hoy se emprenden medidas de control para evitar la afectación de la flora autóctona.

El carácter invasivo de la especie no solo es pernicioso por agotamiento de los suelos o, simplemente, por el hecho de imposibilitar el arraigamiento de especies autóctonas en zonas muy ricas en biomasa de la especie alóctona, sino que se ha demostrado la competencia polínica: estas especies, productoras de polen en grandes cantidades, atraen selectivamente a los insectos polinizadores, que no desempeñan adecuadamente su rol ecológico con las especies menos abundantes, locales, que ven mermada su reproducción.