noticias miraflores
Noticias
Alejandro Olmedo: un cacique mistiano, enrazado y brillante tenista mundial
10.12.2020  

• Ha muerto una leyenda del tenis, pero su obra jamás se olvidará.
• Honores para un peruano ejemplar.

Escribe: Marco Touzett Luna

El fallecimiento de Alejandro Olmedo, a los 84 años de edad en Los Ángeles (Estados Unidos) pone nuevamente en el tapete la dimensión de un deportista peruano de talla mundial, cuyos triunfos en el tenis lo convirtieron en leyenda viva.

Nacido en Arequipa el 24 de marzo de 1936, desde temprano mostró sus habilidades en el llamado “deporte blanco”. Sus primeros triunfos fueron en el Club Internacional de Tiro de su ciudad natal donde era recoge bola.

Ya en Lima, entrenó en la escuela privada Santo Tomás de Aquino y en el Club Tennis Las Terrazas de Miraflores. En esos momentos carecía de entrenador.

Fue entonces que el técnico estadounidense Stanley Singer lo observó y lo llevó a Estados Unidos, donde la universidad del Sur de California decidió becarlo en 1954 para que defienda sus colores. No fue ajeno a sufrir episodios de racismo en algunos torneos, lo cual en lugar de debilitarlo lo estímuló a fortalecer su carácter forjado en la volcánica “Ciudad Blanca”.

Se trataba de un tenista con potente saque, con juego variado y diversidad de golpes. Era un jugador muy agresivo y certero.

Tras sus primeros triunfos, adquirió la nacionalidad estadounidense en 1957 lo cual le permitió integrar la selección de tenis de dicho país que el año siguiente ganó la codiciada Copa Davis, el máximo torneo mundial de equipos nacionales.

La calidad de Alex Olmedo, como era conocido en los circuitos tenísticos internacionales, quedó ratificada cuando en 1959 se convirtió en el tenista número 1 del mundo al campeonar en los torneos de Wimbledon (Gran Bretaña) y en el Open de Australia, que junto a Roland Garros de Francia y el Open de Estados Unidos conforman el Grand Slam del tenis mundial.

Hasta la fecha Olmedo Rodríguez es el único tenista peruano y sudamericano en haber ganado el torneo del mítico Wimbledon, que se juega en la llamada “La catedral del tenis” y que es considerado el más importante del mundo. Su victoria sobre el multi campeón australiano Rod Laver hizo resaltar su importantísimo logro.

En el Open de Australia logró la victoria ante el local Neale Fraser, lo cual era un indicador de su imparable racha de victorias. Esta precedencia fue ratificada al ganar el título en dobles masculinos en el Open de Estados Unidos en compañía del estadounidense Hamilton Richardson, que lo consolidó como una de las estrellas del tenis mundial.

Su retorno al Perú fue apoteósico. Tras multitudinario recibimiento en el aeropuerto de Limatambo, jugó un partido de exhibición en un improvisado court instalado en el centro de la cancha del Estadio Nacional, ante más de 50 mil personas, récord de asistencia en un partido de tenis en el mundo. También jugó en su natal Arequipa, donde miles de sus paisanos lo apreciaron en un abarrotado escenario.

Sus logros deportivos fueron reconocidos por nuestro país y fue el entonces Presidente Manuel Prado Ugarteche quien le hizo entrega de los Laureles Deportivos. Su nombre luce desde entonces en el frontis del Estadio Nacional, junto a los más destacados deportistas peruanos de la historia.

Ya en su faceta como entrenador, logró hacer amistad con los magnates de Hollywood a quienes daba clases de tenis. Asimismo entre sus alumnos estuvieron los actores Ronald Reagan (Presidente de Estados Unidos), Raquel Welch, Kirk Douglas y Katherine Hepburn. En 1968 sus ingresos económicos en esta nueva faceta eran superiores a los que percibía jugando torneos nacionales e internacionales. Este hecho, entre otros, aceleró su retiro de las canchas.

En 1989 ingresó al Salón de la Fama del Tenis, exclusivo club al cual pertenecen sólo las más grandes estrellas del tenis mundial como Rod Laver, Björn Borg, Jimmy Connors, Pete Sampras, André Agassi. Boris Becker, Steffi Graf, Guillermo Vilas, Gabriela Sabatini, Ilie Nastase, entre otros.

Apodado como “The Chief” (El Jefe) o “El Inca” en Estados Unidos y como “El Cacique” en el Perú, Olmedo nunca olvidó sus raíces arequipeñas ni al Perú, a los cuales mencionaba en innumerables reportajes periodísticos. Un peruano que derramó calidad por los más importantes escenarios tenísticos del mundo y que llena de orgullo al pueblo peruano.

Descansa en paz, Cacique. Los peruanos te honramos y jamás olvidaremos tus éxitos.

Miraflores, 10 de diciembre de 2020.