• A 100 años del nacimiento de la “Reina y Señora de la Canción Criolla”.

Cien años del nacimiento de “La Chola” María de Jesús Vásquez se cumple este domingo 20 de diciembre de 2020. Fecha histórica para la canción popular peruana, encarnada en el vals que ella supo difundir y que traspasó fronteras.

Jesús Vásquez tuvo una voz que acariciaba las letras de los valses, polcas y marineras que hacia fines de la década de los 30 irrumpe en el escenario criollo nacional, para continuar exitosamente dentro y fuera del país.

La voz suave de “La Chola” para entonar los valses era una melodía, que se entremezclaba con las letras poéticas que escribían los compositores de la época. Quizás “El plebeyo”, de Felipe Pinglo Alva, “Corazón, de Lorenzo Humberto Sotomayor y “Todos vuelven”, de César Miró, fueron los valses símbolos de Jesús Vásquez que se los pedían los auditorios repletos de admiradores.

Cátedras cantando

Como no recordar esas épocas en las que se presentaba Jesús Vásquez en la radio y en la televisión peruana (cuando era de blanco y negro), dando verdaderas cátedras en su cantar.

Los turistas extranjeros que llegaban de visita al Perú tenían como destino conocer el santuario milenario de Machu Picchu, la bella ciudad balneario de Miraflores, pero también estaba en su agenda obligatoria ir a escuchar la voz de la “Reina y Señora de la Canción Criolla”, María de Jesús Vásquez.

Y los peruanos que se encontraban radicando en el extranjero, como en la Argentina, Chile, Ecuador, México, Estados Unidos, entre otros países del continente, de Europa, Australia y otras regiones, celebraban con indescriptible emoción la visita que por esas tierras hacia “La Chola” en sus giras internacionales.

Las lágrimas generadas por la emoción de ver y escuchar a Jesús Vásquez lejos del país eran incontrolables. Recordar a la patria por medio de “El plebeyo”, “Corazón”, “Todos Vuelven” y otros temas era sentir en lo más hondo del corazón el espíritu de peruanidad. Esa peruanidad que hay que fortalecerla día a día, sobre todo en estos momentos de incertidumbre en que la pandemia lacera el alma del pueblo peruano.

Ejemplo que debe replicarse

Que el ejemplo de Jesús Vásquez se replique a lo largo y ancho del territorio nacional y que vuelvan a salir cantantes y compositores enamorados del Perú.

Nuestra querida cantante era limeña de pura cepa. Nació el 20 de diciembre de 1920 en la famosa calle de Pachacamilla (Jr.Chancay), donde se encuentra la Hermandad del Señor de los Milagros.

A los 18 años debutó, el 3 de febrero de 1939, en un espacio de la desaparecida Radio Grellaud. Luego de dos meses de trabajo, en abril de ese año fue llevada por el empresario chileno Sierralta a Radio Goycochea al lado del compositor Lucho de la Cuba, que provenía del grupo Los Criollos.

Su reconocimiento vino por su interpretación del vals peruano «El plebeyo», en una invitación para realizar un homenaje al compositor en el Teatro Segura. Gozando ya de la admiración e incrementado en dicho homenaje su popularidad, el compositor Pedro Espinel, la lleva al Centro Musical Felipe Pinglo, que estaba ubicado en los Barrios Altos.

El 19 de julio de 1939 la revista La Lira Limeña organiza un concurso musical en el cine Teatro Apolo, en el barrio del Chirimoyo, con votación popular de sus radioescuchas. Jesús Vásquez gana el certamen y es coronada como la “Reina y Señora de la Canción Criolla”.

Corto tiempo después es contratada para cantar en el cine en la película peruana El gallo de mi galpón, en donde interpretó «El plebeyo». Continuó su carrera artística en Radio Nacional, Radio Victoria y Radio Lima; todas ellas la querían como figura central de sus emisiones estelares diarias.

Inició giras por el interior del país y en 1945 viajó a Buenos Aires, firmando para los sellos discográficos Odeón y Dion, donde bajo la dirección musical de los maestros Jorge Huirse y Carlos Martínez, respectivamente, grabó temas como Todos vuelven, Cholita, Secreto, No quiero volver a querer, Morropón de San Miguel, y el ya famoso El plebeyo, entre otros. Luego realizó una gira internacional, llegando a Chile, Bolivia, Colombia, Venezuela, Centroamérica, Estados Unidos, México, Francia y Australia. De allí para adelante los caminos se alumbraron para conducirla hacia el éxito indiscutible. Recibió numerosos premios y homenajes sin que cambiaran en lo más mínimo su característica sencillez.

Agradecimiento especial a Pocha Vásquez, hija de Jesús, y al fotógrafo profesional Daniel Ávila Ramos por colaborar con material fotográfico para la edición de esta publicación. (JAC)

Miraflores, 19 de diciembre de 2020.