Con el apoyo de la Municipalidad de Miraflores, la fiscalía provincial de prevención de trata de personas, el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables, la Superintendencia de Migraciones y la Policía de Extranjería, intervinieron a una docena adultos y más de 20 niños, que mendigaban o vendían dulces en las calles del distrito.
En la tercera operación Sácalos de la Calle que se desarrolla en Miraflores. Más aun cuando, en los últimos días, el número de personas con esta conducta se ha incrementado considerablemente.
Durante la operación se intervino a 22 niños y 12 mayores de edad, de los cuales nueve son de nacionalidad venezolana.
“Sobre todo en esta época previas a las fiestas navideñas se usa a niños que son explotados por mayores de edad que ni siquiera son sus padres. Eso está prohibido, eso es ilegal e inhumano” señaló Miluska Romero, fiscal de Trata de Personas.
“Se expone a estas criaturas, a que les pase cualquier desgracia o que se enfermen con el frio hasta altas horas de la noche. Eso no se va a permitir en Miraflores” sostuvo Abdul Miranda, Gerente de Seguridad Ciudadana de la comuna miraflorina.
Entre los menores, incluso, había dos niñas con discapacidad y en silla de ruedas que eran usadas para generar compasión entre los transeúntes.
Los niños, acompañados de sus supuestos padres, eran ubicados en esquinas y en la puerta de establecimientos de venta de comida. En otros casos ingresaban raudamente a la pista para vender golosinas o pedir limosna, exponiendo su vida.
Tres de los venezolanos intervenidos que exponían a los niños al peligro en esta cruel actividad no pudieron probar ser padres de los menores.
“De comprobarse que, además, están de manera ilegal en nuestro país, se los pondrá a disposición de Migraciones para iniciar el proceso legal y sean enviados de retorno a su país” indicó el comandante Oscar Nakandakari, Jefe de la Comisaria de Miraflores.
Finalmente, todos los niños quedaron bajo custodia del Mindes, mientras que los mayores de edad a disposición de la Policía Nacional.
Miraflores, 24 de octubre de 2019.