Cuando el pintoresco pueblo de Miraflores tenga construido el cincuenta por ciento de las áreas urbanizables de los fundos Surquillo y Santa Cruz, cosa que sin duda ocurrirá dentro de cinco o seis años, habrá dado un gran paso para convertirse en un atrayente balneario. Ya se ha detectado el lugar por donde se podría descender a la playa y se proyecta la construcción de una línea de tranvía y también servicio de ómnibus. A diez minutos de Lima, en tranvía, se podrá disfrutar de saludables brisas y refrescantes aguas de mar. _______ H.L.M.